El plástico reciclado que conforma los asientos del taburete proviene de botes de yogur. Los fragmentos de colores son pistas sobre la vida pasada del plástico.
Este material único es el resultado de un proceso de fabricación innovador: los desechos de plástico se reducen a virutas y luego se prensan (sin agregar aglutinante) para formar el asiento del taburete. Por lo tanto, cada taburete tiene sus propias explosiones de color y tonos que pueden variar de un taburete a otro.
Cada taburete Venezia es único y diferente a cualquier otro.
Las patas de acero están diseñadas para durar y no requieren ningún mantenimiento especial. Si es necesario, puedes limpiarlos con un paño de microfibra y agua limpia.