Interior sobrio en Oslo
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Decoración nórdica sobria para esta casita en Oslo en la que viven la diseñadora de moda Cathrine Hammel, su marido y los tres hijos de ambos.
Una casa totalmente renovada y redecorada.
Los hijos no sé cuántos años tienen pero, aparte que no hay fotos de sus cuartos, nadie diría que esta casa viven niños, ni una pista al respecto.
Empezamos por la bonita y luminosa sala de estar con varias ventanas. Es una estancia abierta y en cada extremo, un sofá.
Uno de los sofás se adapta a las dimensiones de la ventana y, junto con el resto de muebles bajos, sigue la línea decorativa inspirada en los campamentos beduinos. Alfombra, cojines y espejos proceden de Marruecos.
El tapiz colgado en la pared está hecho por la abuela de Cathrine.
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En un rincón al lado de la sala, un lugar de trabajo bajo una ventana. La mesa es de Ikea. La foto de Peter Jordanov es de herencia. Aquí también destaca una alfombra marroquí.
El suelo de madera es nuevo, se ha instalado sustituyendo un pavimento de color blanco.
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El comedor comparte espacio con la cocina. Es también muy luminoso y está amueblado de manera muy sobria. En la pared, arte fotográfico colocado de manera asimétrica. Y muchas plantas, que acaban de rellenar y vestir toda la casa.
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La cocina no es la típica cocina nórdica blanca, los muebles y la encimera de la isla son negros. No hay muebles altos y esa pared está revestida con azulejos de color gris.
La encimera de la isla es blanca y el panel frontal que da al comedor es de latón, lo que le confiere un aire sofisticado al que ayudan los bonitos taburetes Revolver, de Wrong for Hay, en color negro.
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El dormitorio principal sigue la misma línea sobria y minimalista del resto de la casa. La mesita de noche, igual que las estanterías que vimos en el comedor, son una estructura negra con superficies de apoyo.
También los apliques de la pared tienen la misma estética que las lámparas de la sala de estar.
Por lo demás, ropa de cama en color gris, arte en la pared del cabecero y un perchero con la ropa a la vista. Se intuye también un sofá o butaca en color blanco con pespuntes negros.
Aquí el suelo es de la misma madera que en la sala y comedor, pero con los tablones colocados en línea en lugar de en diagonal.
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Es una lástima que no haya más fotos, nos faltaría ver el baño y las habitaciones de los hijos.
Aún así, es una bonita casa que seguro os ha inspirado. Es así?
Fotos: Inger Marie para Bo Bedre
